El autoexamen de mama es uno de los procedimientos más sencillos e importantes que puede hacerse una mujer, ya que puede llevar a una temprana detección de problemas como tumores y posiblemente cáncer.
Es muy fácil y debe realizarse de forma visual y táctil.
Autoexamen visual
Este se realiza de pie y frente a un espejo.
- Con los brazos a los lados, busca texturas diferentes en los senos, como arrugas, hoyuelos o piel que luzca reseca.
- Observa el contorno de cada seno buscando alguna protuberancia o bulto visible.
- Observa si el pezón está hundido o si presenta irregularidades.
- Repite con los brazos elevados sobre la cabeza.
Autoexamen táctil
Puede realizarse de pie o acostada.
- Lleva la mano derecha detrás de la cabeza
- Con los dedos medio a índice de la mano izquierda, palpa todo el seno y la axila utilizando algún patrón (en espiral, por ejemplo) para asegurarte que cubres toda el área.
- Realiza el palpado utilizando diversos niveles de presión, para examinar los diferentes tejidos.
- Presiona el pezón para verificar si hay alguna secreción si no estás amamantando ni estás embarazada.
- Repite el procedimiento con el otro seno.
Realizar el autoexamen con regularidad ayuda a que conozcas cuál es el estado normal de tus senos. Esto te permitirá identificar rápidamente cualquier irregularidad, bulto o deformidad que se pueda presentar. Si lo detectas, acude de inmediato con tu médico.