Combate el dolor con mejores hábitos y soluciones prácticas. ¡Conoce tres técnicas!

Un dolor de espalda, cabeza o cuello no debería ser tan desgastante y limitante para tu rutina. Conoce las mejores técnicas y opciones para aliviarlos en pocos minutos y continuar con un estilo de vida activo.

Matices ignorados del dolor
El dolor es universal, todos lo sentimos. Sin embargo, es una experiencia muy personal que suele depender de dos cualidades en la persona que lo padece.

  • Umbral del dolor: es la fuerza que debe tener un estímulo para que la persona lo perciba. Alguien con un umbral bajo es más sensible a una sensación que puede afectar en poco o nada a alguien con un umbral alto. Contrario a lo que se piensa, es un aspecto fisiológico que no se relaciona con el género.
  • Aspecto psicológico: es la reacción personal relacionada con nuestros pensamientos y emociones ante el dolor, experiencias previas o el significado que le damos. Hay personas expresivas que se angustian y lloran, o bastante tolerantes que permanecen calmas.

3 soluciones prácticas contra el dolor

  1. Aplicar frío o calor: es uno de los métodos más tradicionales. Según la localización, motivo e intensidad del dolor, se puede aplicar frío y/o calor al músculo en intervalos de 10 o 15 minutos. Estos también se pueden alternar para aliviar o quitar el dolor. Su uso es común en dolores de espalda y lesiones deportivas.
  2. Técnicas de relajación: buscan disminuir el estrés y ansiedad para reducir la tensión muscular. Son excelentes para potenciar otros métodos para aliviar el dolor como medicamentos o paños fríos y calientes. Se necesita estar cómodo, cerrar los ojos y respirar lento y profundo por algunos minutos para lograr un estado de relajación básica.
  3. Analgésicos de farmacia: pueden ser las más inmediatas y efectivas para aliviar el dolor. Lo más importante es seleccionar las alternativas más profesionales del mercado. Evita automedicarte constantemente y acude al doctor para validar las dosis y tiempo adecuado para el tratamiento del dolor.

¿Cuál de estas técnicas te ha resultado más efectiva?

 

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